NTP 599: Evaluación del riesgo de incendio en entornos laborales 

NTP 599: Evaluación del riesgo de incendio en entornos laborales seguros.

La NTP 599 del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo establece los criterios técnicos esenciales para la evaluación del riesgo de incendio en centros de trabajo. Esta referencia técnica se ha consolidado como una guía clave para empresarios, ingenieros, técnicos de seguridad y profesionales en prevención de riesgos laborales. Su objetivo es claro: garantizar espacios más seguros frente a emergencias, mediante una metodología que permite anticiparse a posibles siniestros y minimizar tanto daños humanos como pérdidas económicas.

Importancia de la boca de incendios en la seguridad empresarial

Uno de los elementos más destacados dentro de los sistemas de protección activa es la boca de incendios, conocida también como Boca de Incendio Equipada (BIE). Su presencia en una instalación es determinante para responder de manera inmediata en caso de fuego.

Las bocas de incendios deben estar ubicadas estratégicamente en zonas de fácil acceso, cercanas a los recorridos de evacuación y alimentadas con presión suficiente en la red de agua. Además, es fundamental que estén correctamente señalizadas con pictogramas visibles y que se realicen inspecciones periódicas que garanticen su buen estado de funcionamiento.

Incorporar este tipo de equipos a la estrategia de seguridad empresarial no solo reduce los tiempos de reacción ante un incendio, sino que también incrementa las posibilidades de controlarlo antes de que se convierta en un siniestro de grandes proporciones.

Armario para extintor: protección y accesibilidad del equipo

El armario para extintor es otro recurso básico dentro de la protección activa contra incendios. Su función es doble: proteger físicamente el extintor de posibles daños o condiciones ambientales adversas y garantizar que este se encuentre en un lugar visible, accesible y señalizado en todo momento.

Los armarios para extintores están diseñados con materiales resistentes y cumplen especificaciones que aseguran la conservación del equipo en condiciones óptimas. Estos deben instalarse en zonas libres de obstáculos y de acuerdo con un plan de distribución previamente definido por los responsables de seguridad de la organización.

Además, es imprescindible que las revisiones periódicas incluyan tanto el estado del extintor como del armario, verificando que el dispositivo pueda abrirse fácilmente y que la manguera o válvula estén en perfecto estado de operatividad.

Cumplimiento de la normativa extintores y regulaciones vigentes

El cumplimiento de la normativa extintores es un aspecto esencial al implementar la NTP 599 en cualquier centro de trabajo. En España, el Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios (RIPCI), junto con normativas específicas como la UNE-EN 3, establece las condiciones que deben cumplir los extintores, tanto en su fabricación como en instalación, mantenimiento y señalización.

Esta normativa extintores contempla aspectos como la presión de carga, caducidad, tipos de agentes extintores (agua, CO₂, polvo ABC, espuma, entre otros), ubicación estratégica y revisiones obligatorias. Su incumplimiento no solo supone sanciones legales y económicas, sino que también compromete la seguridad de los trabajadores y visitantes de la empresa.

Adaptar los planes de prevención a esta normativa garantiza no solo el cumplimiento legal, sino también la efectividad real de los equipos durante una emergencia.

Factores determinantes del riesgo de incendio según la NTP 599

La NTP 599 explica que el riesgo de incendio depende principalmente de tres variables que deben analizarse de manera conjunta:

  1. Probabilidad de iniciación: vinculada a la presencia de materiales combustibles, fuentes de ignición (electricidad, chispas, calor, procesos de soldadura) y condiciones ambientales como ventilación, temperatura o humedad.
  2. Carga de fuego: relacionada con la cantidad de energía calorífica que podrían liberar los materiales almacenados en caso de incendio. A mayor carga de fuego, mayores serán las consecuencias.
  3. Consecuencias previsibles: abarcan daños a personas, pérdidas materiales, impactos medioambientales y la posible interrupción de la actividad productiva.

Identificar y evaluar estas variables permite a la empresa diseñar medidas correctoras efectivas y priorizar acciones de prevención.

Metodología de evaluación según la NTP 599

La metodología propuesta por la NTP 599 combina un enfoque cualitativo y semicuantitativo, estructurado en distintos niveles de riesgo que ayudan a priorizar medidas. Los pasos clave incluyen:

  • Identificación de peligros: localizar fuentes de ignición, materiales inflamables y condiciones inseguras.
  • Evaluación mediante matriz de riesgo: clasificar la probabilidad de inicio (baja, media, alta) y las consecuencias (leves, graves, muy graves).
  • Definición de niveles de riesgo: desde tolerable hasta crítico, en función de la combinación de factores.
  • Planificación de medidas preventivas y correctoras: sustitución de materiales, ventilación adecuada, señalización, formación y control de igniciones.
  • Medidas de protección activa y pasiva: instalación de extintores, armarios protectores, bocas de incendios, rociadores automáticos, detectores de humo y sistemas de alarma.

Beneficios de la aplicación de la NTP 599 en empresas

Aplicar los criterios de la NTP 599 aporta beneficios tangibles para cualquier organización:

  • Seguridad integral para los trabajadores, reduciendo el riesgo de accidentes graves.
  • Protección patrimonial, al minimizar daños en equipos, mercancías e instalaciones.
  • Cumplimiento legal y normativo, evitando sanciones y responsabilidades penales.
  • Mejora de la imagen corporativa, transmitiendo confianza a clientes, proveedores y aseguradoras.
  • Continuidad operativa, reduciendo el tiempo de inactividad tras un incidente.

Formación y cultura preventiva en el personal

Más allá de la instalación de equipos y cumplimiento de normativa, la NTP 599 recalca la importancia de la formación continua. Los trabajadores deben recibir capacitación en el uso de extintores, bocas de incendios y planes de evacuación.

Asimismo, los simulacros de emergencia permiten evaluar la eficacia de los protocolos, identificar áreas de mejora y reforzar la cultura preventiva dentro de la organización.

La NTP 599 como herramienta de prevención integral

La NTP 599 constituye una guía esencial para evaluar y gestionar el riesgo de incendio en centros de trabajo. La correcta instalación de bocas de incendios, la integración de un armario para extintor en la estrategia de seguridad y el cumplimiento riguroso de la normativa extintores refuerzan la protección integral de personas, bienes y procesos.

La prevención siempre será más económica y eficaz que la reacción ante un siniestro. Por ello, implementar la NTP 599 no solo es una obligación legal, sino una inversión en seguridad y confianza empresarial.

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